Presentación en el FSM 21 de las conclusiones de la confluencia de finanzas éticas en el FSMET 20

 

Entre los días 23 y 31 de enero ha tenido lugar el Foro Social Mundial 2021 (FSM 21), inicialmente estaba prevista su celebración en México, aunque a causa de la pandemia se ha celebrado de forma virtual con la esperanza de que el año que viene pueda celebrarse de forma presencial. El viernes 29 de enero, dentro de las actividades organizadas se compartieron los resultados del Foro Social Mundial de las Economías Transformadoras 2020 (FSMET 20) que, gracias a las contribuciones de numerosas confluencias de todo el mundo, ha conseguido establecer una Alianza de las Economías Transformadoras.

Hubo ocasión de compartir aprendizajes con la presentación de los principales resultados de las diferentes confluencias, así como conocer las iniciativas del proceso “Aceptamos el reto”. En la segunda parte de este espacio, Ritxi Usategi Uriarte de la Asociación Elkarcredit de Solidaridad, en representación de la confluencia de las finanzas éticas y solidarias en el proceso del FSMET 20, resumió las conclusiones de todo el trabajo realizado en ese espacio.

Dentro de los principales hitos de la confluencia y lo que ha supuesto dentro de la trayectoria del Foro, se señaló que la confluencia de finanzas éticas empezó a gestarse a nivel local desde los inicios del proceso del FSMET, consiguiendo aglutinar a aquellas entidades financieras que comparten los valores y los principios de las economías transformadoras, y que integran el ecosistema de las finanzas éticas y solidarias a nivel local.

El proceso del FSMET permitió generar múltiples y enriquecedores encuentros propios tanto locales como internacionales, así como la oportunidad de participar activamente en los espacios de inter-confluencias. Todo ello ha contribuido a tejer relaciones y aprendizaje mutuo no sólo entre las propias organizaciones de finanzas éticas sino también entre éstas y otras redes y entidades de las economías transformadoras. Así, las finanzas éticas se han visibilizado como el engranaje necesario para estas economías, poniendo también de manifiesto la apuesta por construir colectivamente un sistema de financiación ético integral y democrático.

A continuación, se desarrollaron los principales elementos para una futura agenda global de las economías transformadoras y cuál es la puesta en valor de estas propuestas en el contexto político, económico y social actual.

Las finanzas éticas y solidarias aspiran a constituirse como el engranaje necesario para las economías transformadoras. Por eso deben aumentar su articulación tanto interna (a través de la creación de productos consorciados y la innovación en la intermediación financiera, préstamos participativos, préstamos semilla, crowdfunding, microcréditos, etc.) como externa, es decir, entre el ámbito de las finanzas solidarias y las economías transformadoras, para avanzar en un proceso de construcción colectiva de un sistema de financiación integral y democrático. El papel jugado por las finanzas éticas debe ir más allá de la financiación y tener una dimensión política para ser ese engranaje que da apoyo, acompaña, difunde y por supuesto también financia proyectos con una visión global.

En ese sentido, la convocatoria para iniciativas de “Aceptamos el Reto” del FSMET que se había presentado anteriormente se consideró como una oportunidad para reforzar la alianza entre iniciativas económicas transformadoras y las finanzas éticas y solidarias.

Desde la confluencia de las finanzas éticas y solidarias se debe trabajar para transformar el poder con estrategias propias en alianza con las otras economías transformadoras y movimientos, para hacer frente conjuntamente a la violación sistemática de los DDHH y ambientales de las grandes corporaciones y a la creciente apropiación por parte de los bancos hegemónicos de conceptos como el de la sostenibilidad ambiental y social, práctica conocida como greenwashing y socialwashing. Por eso, hay propuestas acciones concretas de transformación como la del accionariado crítico, así como incidir políticamente para promover una legislación nacional e internacional que favorezca la extensión de las finanzas éticas y solidarias.