El fin de semana del 21 y 22 de mayo, un grupo de voluntarias de Finantzaz Haratago participó en el ‘Trailwalker’ organizado por Oxfam Intermón. El objetivo era hacer frente a la crisis climática y a la pobreza.
Hicieron un recorrido de 100 kilómetros desde Olot hasta Sant Feliu de Guíxols, en Girona. El reto consistía en llegar a la meta en menos de 32 horas, ¡y nuestro equipo consiguió llegar en 28!
Además del reto propuesto por Oxfam, participar en este Trailwalker tenía otro propósito. Lamentablemente, varios bancos tradicionales aprovechan esta iniciativa para hacerse un lavado de cara a través del ‘greenwashing’. Sus equipos realizan el recorrido con camisetas corporativas y, así, consiguen hacer un marketing como agentes contra el cambio climático.
Sin embargo, como sabrás, la banca tradicional es una de las grandes cómplices de la crisis climática. Según el informe «Banking on Climate Change» [La banca y el cambio climático] de Fiare Banca Etica, publicado en marzo de 2020, entre 2016 y 2019 35 bancos internacionales del sector privado gestionaron la increíble cifra de 2,7 billones de dólares destinados a proyectos y empresas de combustibles fósiles a nivel mundial. Más de 975.000 millones de dólares de estas inversiones se destinaron a la expansión de la industria de los combustibles fósiles. [Fuente]
Fomentan inversiones que destruyen el medioambiente y, después, participan en un trail por el clima; nos toman el pelo. Por eso hemos participado desde Finantzaz Haratago, para visibilizar las finanzas éticas y alternativas y fomentar una visión crítica en este tipo de espacios.
Fue una experiencia maravillosa para el grupo voluntario y, además, tuvieron la oportunidad de conocer a Edurne Pasaban. ¡Aupa equipo! ¡Poco a poco vamos caminando hacia las finanzas éticas y alternativas!